La moda de no presentarse a entrenar
Training Camp ya empezó y estamos a casi nada de que inicie la pretemporada donde los equipos tendrán que decidir cuáles jugadores se quedan y cuales se van.
Antes de pasar a esa etapa, las noticias que trascendieron fueron que ni Ezekiel Elliott, ni Melvin Gordon se presentarán a sus respectivos campos de entrenamiento, buscando nuevos contratos.
Elliott entrará a su cuarto año dentro de la liga y sus 4,048 yds y sus 28 TD por tierra avalan que es uno de los mejores en su posición, pero los Cowboys ya declararon que no negociarán un nuevo contrato este año.
Por su parte Gordon entrará a su último año de contrato que firmó como novato y declaró que está dispuesto a perderse incluso partidos de temporada regular con tal de que los Chargers le den el contrato que él cree que merece. Aunque sus números y sus constantes lesiones no parecen ayudarle.
Estos jugadores siguen la tendencia que marcó la novela entre Le’Veon Bell y su ex-equipo, los Steelers. Recordemos que Bell decidió no presentarse a los campos de entrenamiento, pretemporada o juegos de temporada regular porque ya no quería firmar nuevamente la etiqueta de jugador franquicia y deseaba un contrato multianual como sí lo obtuvo Todd Gurley; la novela terminó con el estelar RB firmando con los Jets de Nueva York un contrato por 4 años y 52.5 millones de dólares.
Pero no sólo los corredores han mostrado esta tendencia. El dos veces ganador del defensivo del año, Aaron Donald, también se ausento a campos de entrenamiento durante la temporada 2017 y 2018, antes de conseguir un jugoso contrato por 6 años y 135 mdd.
Los resultados demuestran que presionar a los equipos con no presentarse durante ejercicios de pretemporada puede llevarte a firmar el contrato que tanto buscas, aunque la molestia de aficionados viene de la mano de estas ausencias.
¿Crees que está bien que los jugadores ejerzan presión cuando creen que merecen un contrato mejor de esta manera?
Por Hector Alvarez (@HectorAlvB)